Castro da Cidá

Uno de los lugares con más historia de la localidad de Ribeira es el antiguo castro que se sitúa a medio camino entre las parroquias de San Paio de Carreira y de San Xian de Artes. Se tras del Castro de A Cidá, cuyos restos se encuentran también en una zona que ya solo por las vistas que ofrece merece ser visitada.

¿Cómo es el Castro?

El Castro de A Cidá no destaca por ser el de mayor tamaño de Galicia, pero si por encontrarse en una zona especialmente protegida por su ubicación. La estrechez de la cima de la montaña y las formas naturales del terreno en el que se levantó esta pequeña población ejercían de defensa de una zona desde la que se podía mantener controlada toda la costa.

El Castro tienen más de dos milenios y medio y pudo ser levantado durante la Edad del Hierro aprovechando los terraplenes y rocas del monte como obstáculos frente a los invasores y protegiendo el a mayores el acceso a la zona residencial con una triple muralla detrás de la cual se escondían las viviendas de los residentes en casas de ambos formatos conocidos en los diferentes castros gallegos; de planta cuadrada y de planta redonda.

Se estimar que la totalidad de la antigua población de A Cidá ocupaba unas dos hectáreas, aunque hoy no todo el castro está excavado. El Castro ha sido objeto de excavaciones y estudios recientes durante los últimos años y estos se han intensificado desde el 2005. Los últimos, cuya finalización fue en 2015, sirvieron para consolidar todo el trabajo hecho con anterioridad y humanizar y poner en valor el castro de cara a futuros visitantes. Unas trece de las antiguas viviendas de A Cidá salieron a la luz tras estos trabajos en la zona más elevada de la montaña.

En la zona del Castro de A Cidá podemos encontrar también los restos de otro edificio que nada tiene que ver con el origen histórico del castro. Se trata de un edificio cuadrado del que hoy aun quedan los cimientos y que se cree que era utilizada como garita de vigilancia de la ría durante el siglo XVIII.

Unas vistas de impresión

A pesar de que el Castro se encuentra solo a 200 metros de altura, la visión que se obtiene desde su cima ofrece una de las mejores panorámicas del Barbanza. Una visita al Castro de A Cidá nos permitirá sacar un retrato de toda la bocana de entrada de la ría de Arousa y de las poblaciones de la costa cercanas a Ribeira junto con el Parque Natural de la Dunas de Corrubedo.