As Gándaras de Budiño

En el sur del municipio de O Porriño nos encontramos con todo un ecosistema natural conocido como As Gándaras de Budiño. Es una zona llana aluvial y pantanosa próxima al río Louro, afluente del Miño. Por su proximidad al Atlántico y la humedad que existe en esta localización, se convierte en una zona pantanosa de importante valor natural. También debido a esta localización, experimenta inundaciones parciales en épocas de crecidas, aunque la hidromorfía propia de los terrenos, con representaciones de turberas y brañas, implica un estancamiento del agua en algunas áreas formando lagunas de poca profundidad.

Las Gándaras de Budiño están catalogadas como Zona de Especial Protección de los Valores Naturales y también como Refugio de Fauna.

Fauna y flora

Las Gándaras de Budiño ocupan una superficie de más de 700 hectáreas y lo más destacado es su riqueza en cuanto a la fauna y la flora del lugar. Destacamos las especies de vegetación acuática y, sobre todo, la gran cantidad de aves migratorias y acuáticas (Garzas, lavancos, cercetas…) que tienen su punto de cría en esta zona. Todo ello dota a Las Gándaras de Budiño de un interés especial desde un punto de vista científico para ornitólogos y biólogos. Además, existen importantes formaciones de bosques de ribera, en algunos puntos muy bien conservados y que cubren buena parte del espacio.

En cuanto a otras especies animales que habitan en la zona, podemos hablar de algunos reptiles y anfibios como las ranas, la culebra de collar o las tortugas. También en lagarto verdinegro.

El lugar cuenta con varios observatorios de aves a los que se recomienda acudir ataviado con prismáticos para disfrutar de la visión de todas las especies que sobrevuelan los cielos de O Porriño.

Los asentamientos prehistóricos

En las Gándaras de Budiño se encontraron asentamientos paleolíticos que se pueden visitar gracias a los recorridos de senderismo que existen. Se trata de un yacimiento arqueológico que los expertos han datado entre los años 18.000 y 26.000 antes de Cristo. Fueron descubiertos en el año 1961.

Aunque las señalizaciones y conservación no sean las mejores, este lugar es uno de los yacimientos del paleolítico de mayor relevancia del noreste de español. Se han hecho numerosos estudios en el lugar, sobre todo en la década de los 90, que permitieron descubrir que la zona de Budiño fue objeto de numerosos asentamientos en la prehistoria. Ya en 2018 los trabajos se retomaron los estudios para dictaminar que en Galicia existió un Paleolítico que era anacrónico y atípico con respecto al que se vivió el suroeste del continente europeo.