Restos de un poblado de hace 2.000 años
El Castro de Santa María de Cervantes es un antiguo poblado castrexo que se ubica en plena sierra gallega de los Ancares. Este vestigio arqueológico podemos visitarlo a unos 12 kilómetros del núcleo urbano de Cervantes, concretamente en la parroquia de castro. Próxima al castro se encuentra la iglesia de Santa María.
Inicios de nuestra era
El poblado castrexo de Santa María de cervantes puede estar datado de comienzos de nuestra era, durante los siglos I y II de la Edad del Hierro que marcan el proceso de transición entre los modelos de vida prerromanos y el dominio del imperio en tierras galaicas. La explicación de este poblado está relacionada con la de las minas de oro situadas muy próximas.
Cabe decir que este poblado antiguo no fue la única huella del paso humano por la zona, pues en esta misma zona del valle del Quindós se construyó entre los siglos XIII y XIV una necrópolis medieval con más de medio centenar de sepulturas y para la cual se hizo uso parcial de algunas de las piedras que antes formaban parte de las edificaciones del castro.
Los trabajos de investigación en esta Castro se llevaron a cabo a finales del pasado siglo, entre los años 1995 y 1999. Fue en estos años en los que se puso en valor la zona por el gran interés de todos los restos allí encontrados y que hoy forman parte de la colección y depósitos del Museo provincial de Lugo.
¿Cómo es el castro de Cervantes?
El castro de Santa María de Cervantes se ubica, como suele ser habitual en este tipo de poblados, en una zona elevada o promontorio. Esta altitud le da facilidades defensivas y un dominio estratégico de la visión de valle del río Quindós. El poblado tiene un eje Norte-Sur de unos 80 metros por unos 50 metros en el eje Este-Oeste.
En las investigaciones arqueológicas llevadas a cabo en el castro se encontraron unas 23 construcciones que se creen que fueron viviendas o edificios destinados a uso doméstico y también diferentes calles o zonas de paso entre ellas, así como escaleras, muros de descarga, sistemas de drenaje y muros de nivelación que hablan de una estructura inteligente en el desarrollo del poblado.
Es interesante también la distribución interior de algunas de sus construcciones, pues en ellas fueron capaces de distinguir muros internos en las casas y hasta primitivas construcciones de piedra a modo mueble o alacena. Hay documentados incluso marcos de madera en las puertas de acceso a los edificios, la mayoría de planta circular.
