San Valentín. El día de los Enamorados

El 14 de Febrero de todos los años se celebra la festividad de San Valentín, aunque también se conoce a este día como el Día de los Enamorados y, poco a poco, se ha implantado la tradición de intercambiar obsequios entre las parejas en esta fecha tan señalada.
Como ya sabemos el amor es universal y la intención de demostrárselo a la persona querida es un hecho que se repite en todas las sociedades, épocas y países. Hay símbolos (corazones, angelitos, lazos, etc.), hay expresiones ("I love you", "te quiero" "bésame"), hay regalos (bombones, flores, joyas, etc.), hay demostraciones de afecto, amor y cariño (cartas de amor, poemas, postales, tarjetas, valentines, etc.) que son totalmente internacionales, trascienden todas las fronteras y se realizan de forma unánime en todos los rincones del mundo. Hay otras costumbres o tradiciones más específicas de cada parte del planeta. Algunas más conocidas, otras desconocidas, no dejan de sorprendernos los ritos que el ser humano ha manejado a lo largo de la historia para demostrar el amor a su pareja.
En España, por su parte, el Día de San Valentín es muy especial. Según se va acercando la fecha todos los enamorados están absortos en la búsqueda del regalo perfecto. A este respecto, debemos decir que, sin duda, la tradición de regalar una rosa como símbolo de fortaleza y de pasión de la pareja es la que más se repite.
A pesar de que las rosas son la flor preferida por los amantes, los tiempos pasan y, con ellos, también las costumbres de San Valentín. Es por esto por lo que, cada vez más, se van dejando de lado las rosas y se regalan otro tipo de motivos florales como las margaritas, los gladiolos, claveles u orquídeas. Y es que, al fin y al cabo, quizás no sean tan importantes las flores como los mensajes que las acompañan.
Otra de las costumbres que se llevan a cabo es la de invitar a la pareja a una cena romántica y brindar por un amor eterno. Esta celebración se incluye, en muchas ocasiones, dentro de un viaje romántico a un hotel con glamour o a una casa de turismo rural, por ejemplo. Ya sea en un lugar o en otro las parejas procuran hacer la reserva deseada con bastante anticipación, puesto que este día está más que solicitado.
Y, por último, una tradición íntima típica de esta época es la de regalar sutiles prendas de lencería. El juego entre las parejas, cuando se hace con amor, es de lo más divertido y placentero. Y, sobre todo, muy sano. Así que, ¿a qué esperas para organizar el día de San Valentín para ti y tu pareja?