Iglesia de Santa María de Cambre

Por el municipio de Cambre transcurre parte del Camino Inglés de Compostela, ya que por aquí pasaban los peregrinos, en su mayoría de los Países Bajos, que desembarcaban en el puerto de Coruña. En este lugar se puede visitar la iglesia de Santa María de Cambre, un monumento catalogado de Interés Histórico - Artístico Nacional por ser uno de los pocos ejemplos que se conservan del arte románico en su estado más puro.

¿Cómo es la iglesia?

La Iglesia de Santa María en Cambre es el único resto que se conserva hoy en día de un antiguo monasterio del siglo IX que fue destruido en 1182. Las reconstrucciones e intervenciones en el templo a lo largo de la historia hace que se entremezclen estilos y obras de diferentes etapas, pues el edificio se fue reconstruyendo hasta en tres fechas históricas diferenciadas.

El templo posee una construcción monacal de puro estilo románico del siglo XII. Consta de planta de cruz latina con tres naves, crucero y deambulatorio con cinco capillas que giran en torno a la mayor y que conservan la estructura original. En un salmer del ábside se puede leer la inscripción de uno de los posibles constructores: Michael Petri, posiblemente el arquitecto que finalizó la obra.

Llama la atención desde fuera su gran tamaño y una cabecera imponente en la que son perfectamente distinguibles los cinco absidiolos que dan forma al conjunto. La fachada está culminada con una espadaña con las campanas en su interior y bajo esta, un rosetón formando una celosía de pequeños círculos que giran alrededor de uno mayor. El tornalluvias resguarda la entrada principal de la lluvia y descansa sobre canecillos con formas de animales. La entrada principal es estrecha y cuenta con dos arquivoltas, la exterior decorada con motivos animales y con el profeta Daniel entre los leones en su parte central.

En los capiteles de la fachada se pueden observar imágenes de San Miguel luchando contra el dragón del Apocalipsis y la puerta está flanqueada a ambos lados por dos ventanas estrechas de cinco arcos de herradura de influencia compostelana.

En el interior, las naves están divididas en cuatro tramos y separadas por pilares compuestos. Se puede acceder y contemplar la capilla mayor y la girola de absidiolos desde un deambulatorio interior, aspecto más característico de la influencia compostelana, tan abundante en esta construcción.

Un lugar para la leyenda

La iglesia de San María de Cambre es un lugar para historias y leyendas, algunas ajustadas a rigor histórico y otras más a lo fantasioso y a las historias de la cultura popular.

Uno de los primeros y desgraciados hitos históricos de los que se puede hablar haciendo referencia a este templo es el del ataque del temido corsario inglés, Drake (siglo XVI). Los ingleses, que no consiguieron tomar la ciudad de A Coruña, sí se cebaron con los pueblos próximos y la iglesia sufrió la ira de los hombres de Drake para ser incendiada y destruida. También el ejército napoleónico (comienzos del siglo XIX) se cebó con la iglesia años después provocándole daños. Así las cosas, el templo tuvo que ser reparado y reconstruido en diversas ocasiones.

Si nos centramos en lo fantasioso, en la leyenda, podemos hablar de dos historias entrelazadas. Se cuenta que bajo el suelo del altar de la iglesia de Santa María de Cambre hay oculto un pasadizo secreto que lleva por una vía subterránea hasta los que son los restos del castro de Cambre. Dicho pasadizo secreto tendría la finalidad de dar una vía de escapa a los monjes en caso de peligro, algo que la historia ha demostrado que era necesario.

Esta leyenda comunica directamente con la del Pozo de la Campana, la cual habla de una gran campana que permanece oculta en el fondo del río Mero, muy próximo al Castro, y que tañen en los momentos en los que está a punto de acontecer una desgracia importante.